lunes, 16 de enero de 2012

¡AY ASTURIAS!

Se critica, y puede que con razón, la inmovilidad del gobierno Cascos y se comenta, y con razón, que de las campañas de choque en cada una de las Consejerias no queda nada o no se explica nada en el mejor de los casos.
El "avance" o lo que se sabe de los presupuestos es atacados por todos, sindicatos, patronal y otros elementos "sociales" como la FADE, la cámara de la construcción y el "susum corda". Algo falla, comunicación, planificación, algo, todo menos trabajo, que en eso este Cascos es campeón.

No puede ni deben "los medios sociales" pretender que nuestro gobierno invente, cree o "faiga" dinero para inversiones para que el sector de la constucción este contento o que los sindicatos aplaudan con las orejas.
Hay lo que hay, es más, hay lo que nos merecemos, lo que nos dejaros los socialistas Ayuntamientos arruinado y pufos por todos los lados. Arreglar esto no es cuestión de días y el Serafin, Vigón, Braga y el que pinta, debe saberlo; si ellos tienen la barita mágica, pues muy agradecidos, no hay que olvidar que fueron las empresas de la construcción las grandes beneficiadas por el abusivo y extraordinario desfase en las obras de licitación oficial. Es vergonzoso que ningún "técnico" se haya "percatado" de estos desfases antes de iniciar las obras; mejor con desfases ¿verdad?.
Que se puede pensar de una autonomía donde cuatro, bueno, cinco tíos tienen detenida una inversión millonaria y la creación de un "buen montón" de puestos de trabajo por que les sale de "las napias". Me estoy refiriendo a la mina de Oro de Tapia de Casariego, mina de oro cuyo proyecto esta bendecido por todos y cada uno de los estamentos nacionales y regionales exceptuando el Ayuntamiento de la zona. ¿Es que hay más papistas que el papa? No entiendo, quizá no este preparado como la mayoría de los ediles de Tapia, a comprender lo que es bueno para Narcea no lo se para Tapia.
No hay derecho, se debe EXIGIR todas las garantías marcadas por la ley, incluso más, pero no se debe consentir caprichos de nadie; estamos como para perder puestos de trabajo y luego pedir a Cascos que "cree" puestos de trabajo. ¿Dónde están las Cámaras de Comercio, Serafin, Vigón y los sindicatos en el "problema de Tapia?. Debajo la cama oiga.
Lamentable lo de Tapia de Casariego e incomprensible el tremendo silencio de los estamentos de Asturias.
De esta no salimos. NO vamos a necesitar suerte, vamos a necesitar un milagro y eso, me temo, que ni Cascos puede hacerlo.

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