¡Mi pobre Asturias! Ha llegado el cacique de Cascos y quiere borrar totalmente su pasado y el pasado del PP en Asturias. Me recuerda al nefasto e infantil presidente de gobierno de España, el embustero Zapatero que quiere cambiar la historia, no solo del país, si no del propio partido socialista.
Pero Cascos, a mi entender, no se ha rodeado de "hombres buenos" y si de un buen montón de rencorosos "peperos" que no han tenido ocasión de brillar. Es hasta posible que dentro de estos peperos haya alguno aprovechable pero la mayoría estoy covencido que no da la talla.
Es el caso del tal Arturo Gonzalez de Mesa que está empeñado en deshacer el convenio con Comansa y ¡claro! no aporta ningún tipo de solución alternativa, mire usted, una podría ser pagar de nuetro bolsillo la deuda que se tiene con Comansa y aquí paz y después gloria, es como si aumentasen los impuestos una vez más.
Yo no sé a que viene tanto empeño en no hacer el aparcamiento, sinceramente creo que Oviedo lo necesita y si no lo hiciese Comansa otro lo debería hacer. Otro tema es si se llevó bien o no el asunto de Villa Magdalena, que no se hizo bien, pero que los ovetenses se lo han cobrado al alcalde con la retirada de votos, bien ya está, ahora todos a trabajar.
Sin embargo no me gusta la pinta del tal Arturo, me parece que seguirá los pasos de la Paloma. Lamento profundamente si alguna vez escribí que prefería a Cascos. Por favor, les suplico mil perdones, uno está a veces tan cabreado que se le nubla el entendimiento.
La cerrajón de las FAC a no pactar con el PP no me convence y ¡oiga! pierden los asturianos que mayoritariamente a votado centro-derecha.
Que el PP haya tenido que pactar con el Pz(oe) la presidencia del parlamento no augura nada bueno.
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